Iván Fuentes, joven bombero de La Unión: “No siento la diferencia entre tener o no diabetes”
“Hasta los 7 años me daba por llorar preguntándome ¿por qué a mí y no a otra persona? Me costaba ver a mis amigos comer cosas que yo no podía y tampoco me atrevía a contarlo, porque pensaba que me podían discriminar, pero eso nunca pasó”, cuenta.
Fanático del ciclismo de ruta, estudiante de II Medio del Colegio de Cultura y Difusión Artística de La Unión y bombero, Iván Fuentes tiene una vida como cualquier adolescente de 15 años. “No siento la diferencia entre tener o no diabetes, me han tocado incendios y accidentes, y es lo mismo; si voy a salir y ya estoy controlado solo me preocupo de llevar una colación”, afirma.
Cuando debutó a los 3 años, su mamá Magaly Risco sintió el golpe de la noticia. “Me costó aceptarlo, porque soy hija de padres diabéticos. Tenía mucha pena, pero le expliqué que aunque tenía esta condición, no era diferente a los demás”, asevera Magaly.
Siendo Iván muy pequeño, ya tenía síntomas preocupantes. “Al principio tenía cambios bruscos de ánimo, yo pensaba que eran mañas no más. Además tomaba mucha agua”, asevera la mamá, quien es el principal apoyo del joven, ya que viven los dos solos.
Seguir disfrutando
Iván tuvo un cambio en su alimentación. “Los dos aprendimos a comer lo mismo, pero además comencé a preparar comidas sin azúcar, manjar light, queques etc., para que él siguiera disfrutando de cosas ricas”. Sin embargo, a pesar del cariño y regaloneo que recibía, el menor vivía momentos complicados. “Hasta los 7 años me daba por llorar preguntándome ¿por qué a mí y no a otra persona? Me costaba ver a mis amigos comer cosas que yo no podía y tampoco me atrevía a contarlo, porque pensaba que me podían discriminar, pero eso nunca pasó”, relata.
Ella lo ha incentivado a mantener una vida como cualquier joven de su edad. Iván, además de asistir al colegio, participa en la 1ra Compañía de Bomberos de La Unión desde el 2012, y hace más de un año practica ciclismo de ruta y mountain bike. “Mi mamá ha sido un súper apoyo, moralmente, psicológicamente, está siempre preocupada, sin ella no podría haber sido ciclista y mucho menos bombero”, dice Iván.
Magaly supo muy pronto que no era tan complejo como la gente cree si se adoptaban nuevos hábitos. “Para ninguna mamá o papá es fácil digerir una noticia como que su hijo tenga diabetes, pero es fundamental hacerlo para ayudarlo con su nuevo tipo de alimentación y también para incentivarlo a realizar ejercicios y no ser una persona sedentaria”, concluye.